16 junio 2009

Intimidad

Morrison dice que ya no escribo más en el block porque me hice metodista. Es mentira. También dice que dejé el anarquismo y el punk para desayunar en Martínez y en Delicity. No le respondo. Habla y termina hablando solo. Me dice que ahora que tengo loza radiante y alfombra me hago el japonés y me quito las zapatillas Converse al ingresar al departamento nuevo. Estoy un poco obsesionado con que no se me ensucie la alfombra, en principio porque no quiero llamar al limpialfombras. ¿Cómo se sacan las manchas de alquitrán de una alfombra? Morrison no tiene idea. Dice que él puede hacerme la changa. No le respondo. Dice que tiene una espuma que saca todas las manchas, incluso las más difíciles y pone tonito de publicidad televisiva. Todavía estoy rodeado de cajas con libros pero ya puedo descansar. No tengo cortinas y cuando duermo los vecinos del décimo piso están al tanto de mis movimientos, así también cuando me baño y cuando corro desnudo por el living como un Guido Kafka en un capítulo de Clave de Sol.

07 junio 2009

Última

Comienza la última semana en mi viejo departamento. Hasta el momento tengo once cajas con libros cerradas y etiquetadas. Faltan diecinueve y calculo que me faltarán catorce más cuando termine de ocupar todas las que conseguí. Pienso en descargar y volver a cargar, como si fuera un revólver de libros que te rompen la cabeza. Acabo de ingresar al weather channel para ver el pronóstico del tiempo del próximo fin de semana, que serán los días para hacer efectiva la mudanza con el flete. Según parece el sábado estará soleado y el domingo habrá 30 por ciento de probabilidades de precipitaciones. Terminaré el sábado. El sábado quizás ya pueda dormir frente a las canchas de Marangoni. El flete será de unos pibes de la barra brava de Huracán: están entusiasmados con el equipo así que vendrán de buen humor. Ahora tengo que armar la logística con los autos de mis amigos. Ya tengo tres autos que estarán disponibles el fin de semana que viene: cada uno de los autos cargará diez cajas de libros y quizás alguno pueda traer algo un poco más grande y pueda meter veinte. Las cajas están numeradas, y no hay polvo como en la mudanza anterior porque no hay canastos de mimbre. Mañana firmo. Mañana cancelo mi deuda con el banco. Parece que estoy armando todo para la gran estafa. Quizás en realidad no me vaya al nuevo departamento. Quizás cambie mi identidad y desaparezca.